REFLEXIÓN INDIVIDUAL (DECRETOS Y MODELOS):
Por mi experiencia como alumna pase por dos tipos de modelo, el punitivo y el integrado. En los dos primeros colegios que estuve cuando se daba un conflicto la profesora castigaba a los alumnos sin preguntar que es lo que había sucedido, no intentaba solucionar el problema.
Cuando pase al instituto, si surgía algún problema primero era el profesor de la clase quien intentaba averiguar que era lo que había ocurrido y solucionaba el problema hablando. En el caso que el conflicto era más grave y el profesor no podía ayudar, las personas involucradas en el problema iban a una “mediadora”, quien hablaba con ambas partes y proponía una solución, que normalmente era aceptada.
Actualmente como educadora de niños problemáticos, en un principio mi actitud fue la de tomar el modelo punitivo, ya que cuando había algún problema entre los niños, castigaba al que había visto que estaba pegando o insultando. Sin embargo me he dado cuenta, mediante esta práctica que no era del todo correcta mi actitud, ya que al utilizar el modelo integrado conseguía mejores resultados ante la solución de lo conflictos y los niños se comportaban de mejor manera, he llegado incluso a que dos niños que no se llevaban bien fuesen grandes amigos. Al tratar los decretos de convivencia de Castilla La Mancha y Madrid, me he dado cuenta la diferencia que hay en la educación. En Madrid se trata el modelo punitivo, se aplica sanciones directamente ante un mal comportamiento y en Castilla La Mancha el integrado, que al surgir un problema se busca la solución mediante los mediadores, con lo que estoy más de acuerdo. Por lo que según mi opinión este modelo debería estar presente en todas las comunidades. De esta manera, ahora y más adelante los alumnos aprenderán a solucionar sus problemas hablando.
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